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domingo, 31 de enero de 2010


Hoy tengo una migaja de tristeza,

Un trocito de terciopelo atragantado,

Una lágrima retenida,

Sentimientos convexos,

Violines que suenan a mi paso,

Ofendo a Dios

Como las flores que mienten en las lápidas,

Ofendo a la vida,

Con esta tristeza que pesa como un yunque

A mis espaldas,

Ofendo a los que me rodean,

Me ofendo a mí misma

mi cuerpo


Mi cuerpo cariado meticulosamente,

Hundido en un enjambre de delirios,

Famélico y huérfano de abrazos,

Abrazos gelatinosos y embrolladores,

Que me salven.

Barrancos de recuerdos,

Tropezones de pena,

Mi cuerpo consumiéndose,

Buscando el poleo que lo resucite,

Recuerdos que caen en mi alma como meteoritos,

Mi cuerpo bajo mis pies herido,

Mutilado desde que te marchaste,

Mi cuerpo gritando, arañado, descosido…

viernes, 29 de enero de 2010

Despidiendome de ti


Vómitos de pena,
Sobre mis sabanas blancas,
Mis lágrimas me empapan,
Caen redondas por mis mejillas,
Muriendo en mi pecho,
En este pecho donde yacen sueños por instantes
 Drogada para sobrevivir,
A la agonía de la vida,
A la inquietud de forjarte
 Para después volver a la realidad
 De no tenerte,
Estertores de lástima
Que me expira el cuerpo,
 Que me matan poco a poco,
 En este amor doloroso,
Este amor que huele a sepulcro.

Amor prohibido


El amor se quedó ciego y mudo,

La ternura con las manos en los ojos,

El cariño detrás de los árboles,

Los besos se ahogaron en el agua,

Las caricias se escondieron tras un banco,

Los abrazos corrieron tras un arbusto,

Detrás de una flor se puso la pasión,

Creo, que tras una fuente se halla un “te quiero”,

Así es este juego, “el escondite”

Este amor prohibido que me gritas,

Pero que silencias por voto a Dios,

este amor que me derriba,

esta espera que me desespera,

Este no conocerte,

Esconderte,

Escondernos.

culpable de perder la sonrisa


El dolor se agolpa en mí,

Siento su entrada por mi piel,

Sumergiéndose entre venas y arterias,

Hasta llegar a mi corazón enjaulado de costillas,

Hasta colarse en mi alma.

Noche de luna llena,

Aquí te espero para que me engullas

Para que hagas de mi lo que quieras,

Aquí pequeña, sola, despavorida.

Esperando a la orilla de la vida,

La botella con mensaje que no llega,

La botella que me salve la vida,

Esperando a los pies de este océano de tristeza,

Esperando que mi sonrisa resucite de mis labios,

Esperando que vuelva la persona que era,

Sintiéndome culpable por sentir dolor,

Culpable por no sonreír.

Devórame luna llena.

El amor trae más amor


A mis padres


Desde este amor tan profundo,

Este amor en forma de constelación

Que nos une aunque la distancia nos separe,

desde esta placenta de ternura

donde me envolvéis con apego,

ahí me encojo como un bebe

cuando tengo miedo,

cuando sufro,

cuando sonrío,

cuando os echo de menos,

me pliego sobre vosotros

en vuestro vientre,

buscando el abrazo tierno que me devuelve a la vida.

Mis queridos escultores a los que amo,


Así me tallasteis siempre trepando en las flores de la ilusión,

Hoy para vosotros tengo barreños de “te quiero”,

Mis manos llenas de dulzura

Derramándola por vuestros cuerpos,

Letras, simples letras que cincelo

Desde el alma, desde el corazón,

Desde este lugar que ocupáis en mí,

Crezco en vosotros cada instante,

Cada momento que respiro,

Os añoro,

Os amo.

Mis dos almas que me guían,

Por este camino,

Sendero liso o empedrado a veces,

Mis ángeles….

                Mis padres.

jueves, 28 de enero de 2010

El exilio




 
Tu exilio hacia el cielo,

Es como un eclipse

Donde la luna tapa el sol en pleno día,

Tu ausencia es como si las estrellas

Hubiesen muerto contigo,

Dejando oscuridad,

Dejando dolor, calvario en mi alma,

Sé que si estuvieses aquí

No te gustaría verme triste,

Pero es tanto el amor que te tengo,

Tanta la devoción por ti,

Que no puedo remediarlo,

Poco a poco mi niña….

Seguiré con esta vida a cuestas,

Poco a poco mi niña…..


Te pensaré y sabré que estas feliz,

Allá donde quiera que estés,

Seguro que tienes un jardín,

Donde cuidas tus flores,

Con esa dulce ternura con la que nos cuidabas,

Que te quiero, que con sólo pensarte,

Se me derrumban las lágrimas,

Que desangro mi tormento,

En cada estrofa, como tú te desangrabas por nosotros,

Que te amo, que te amamos, que no te olvido.

miércoles, 27 de enero de 2010

Cocinando palabras





Alimentarte, nutrirte de palabras,

Bebé de cada letra si tú quieres,

Empápate de mí,

Ese mí que en ocasiones escondo,

Aquí entre cazuelas de imaginación,

Preparándote tu ración para hoy,

No me importa dedicarte el tiempo,

Los sueños, las ilusiones,

Si tú sonríes todo marcha bien,

Tú también me inspiras,

Me haces subir a lo más alto,

Y tomo cada letra y la esculpo,

Como si fuesen figuras de hielo,

Las cocino para que después

Con tus ojos las devores una a una,

Quiero sustentarte con cada vocablo,

Quiero ser tu primero,

Tu segundo y tu postre,

y que no sientas vergüenza

de decirme que me lees,

me llenas de orgullo.

Mi pequeña fiel seguidora,

Yo también te sigo,

En esas conversaciones interminables,

En las que nos hacemos la contra la una a la otra,

En este vivir contigo día a día,

En este no entendernos a veces,

En ese abrazo que surge de la nada,

Sin pedirlo, en ese beso sincero

Que nos va llenando el alma

Despacio sin prisa

Cultivando lo que sentimos,

Nuestro jardín de amistad,

Cada flor que tú pones

La riego con tanto cariño,

Que algún día serán tan grandes

Que las percibirás simplemente con mirarme,

Quiero ser tu invernadero,

Para que plantes en el lo que te apetezca,

Sin esperar a que sea la estación apropiada

Para que crezcan.

Quiero que trepes por mí,

Como si fuese ese árbol de la niñez,

En el que se hacia una casa de madera

Para jugar.

Quiero ser tu cocinera, para hincharte los días,

Quiero que seas mi jardinera,

Para que siembres tus semillas,

Quiero cultivarte y que me cultives...

Tu espejo






En mis pupilas te reflejas,


Este espejo tuyo que proyecta tu geografía,

Los páramos de tu epidermis.

Voy con mi mochila despacio,

Recorriendo cada aldea de tu piel,

Senderos reales, tangibles,

Que puedo tocar y creer.



En mi cristalino te miras diáfano,

Puro como un espíritu celeste,

Y me percato de la luz que me desprendes,

Del resplandor de tu corazón,

Ese brillo que me da confianza

Que me mantiene en vida.



Tengo el iris empapado de ti,

Rezumando tu imagen cada instante,

Te regalo mis ojos, para ti,

Para que siempre tengas un espejo

Donde mirar tu sencillez,

Para que puedas mirarte en mí,

Siempre que te apetezca.

El miedo


Tenemos miedo a muchas cosas en la vida, como
A hablar en público, a una cita, e incluso a reconocer
Que a veces nos sentimos solos. La verdad es que los
Miedos son engañosos porque van formando capas, una
Encima de otra. Es posible ir quitándolas una a una hasta llegar
Al miedo del fondo, el fundamente en el que se apoyan todos
los demás. Y ése suele ser el miedo a la muerte.
Lecciones de vida. Elisabeth K.R.




El miedo nos acorrala desde que somos pequeños,

Día a día, con sus contracciones siento que no me deja ser yo,

Tengo miedo a pensar que esta no es la vida que quiero llevar,

Tengo miedo de pensar que no hice bien algunas cosas,

Esta conciencia de pude hacer más y quiero más,

Nunca tenemos suficiente, ¿nunca será suficiente para mí?

¿Cuándo será suficiente? A veces pienso que tal vez

En mi lecho de muerte, pensaré fue suficiente,

En el peor de los casos moriré y pensaré todo lo que no hice,

Esta reyerta con el desasosiego me da cognición de mi misma,

Y me induce a parar, miro los ojos del pánico, del espanto…

No quiero morir pensando que mi vida no fue plena,

Pero no me encuentro entre la marea,

Este mar de personas, este oleaje de días inciertos,

Buscándome quiero ser tantas cosas de las que no soy,

Y ahora detenida en el tiempo siento que me tiemblan las piernas,

Que no soy capaz de caminar, adivinen…….tengo miedo.

martes, 26 de enero de 2010

El quebranto





Buscando respuestas
estoy asomada al balcón del abismo
mirando mi interior,
donde yacen cajas vacías,
allí lapido mis dolores,
encuentro también un suspiro,
la exhalación más terrible
de la pérdida.


Mi alma corrió despavorida
hacia algún camino incierto,
un sendero en blanco y negro,
repleto de ramajes, de espesa bruma,
una senda que desconozco,
así que, aquí me hallo,
en esta fotografía sin colores,
sin vida, perdida.


Mi corazón ingenuo
no concebía correr sin mi,
y llora de mi mano,
siento su mano cálida,
y por las noches le escucho,
en su temible exasperación,
percibo sus sollozos,
desde mi oquedad.


Buscando respuestas,
me surgen aun más preguntas,
aquí me encuentro quebrantada,
sin aire, ahogándome,
en este mar profundo,
este mar que soy yo misma.

lunes, 25 de enero de 2010

Susurros



¿Sabes, yo creo en las señales?- le digo,

ella más escéptica me cuenta que es porque

estoy más susceptible a ciertas cosas.



Pero yo creo en ellas,

creo que la vida nos susurra,

nos pone migas de pan para que sigamos el camino,

¿Por qué encontré el evangelio en Pamplona?

casualidad o señal,

¿por qué marcado en el "vía crucis"?

casualidad o señal,

mi abuela acaba de morir

siempre me hablaba de las cruces que Dios le ponía,

al fin y al cabo un "vía crucis",

yo creo que es ella, desde arriba.

¿Por qué se acercó el hombre disfrazado de gnomo?

para darnos la sonrisa que no teníamos,

para regalarnos un instante.

¿Por qué las fotos en las que estábamos abrazadas salieron blancas?

porque erámos nosotras unidas en este amor incondicional.

La vida nos susurra,

hay personas que escuchan sus susurros,

que encuentran la luces escondidas del pecho de los otros,

que en la locura, en mi locura, encuentro señales,

suspiros de vida, luces, magia....


Tal vez ustedes sonrían al leer esto,

o piensen pobre alma,

pero yo creo y creo de verdad en ellas.

Tu boca tan lejos

Los recuerdos nos sostienen, los recuerdos me llevan por la cuerda manteniendo el equilibrio para no caer al vacio

viernes, 22 de enero de 2010

QUEDA PROHIBIDO, Pablo Neruda




Queda prohibido llorar sin aprender,
levantarte un día sin saber que hacer,

tener miedo a tus recuerdos.



Queda prohibido no sonreír a los problemas,

no luchar por lo que quieres,

abandonarlo todo por miedo,

no convertir en realidad tus sueños.


Queda prohibido no demostrar tu amor,

hacer que alguien pague tus deudas y el mal humor.



Queda prohibido dejar a tus amigos,

no intentar comprender lo que vivieron juntos,

llamarles solo cuando los necesitas.


Queda prohibido no ser tú ante la gente,

fingir ante las personas que no te importan,

hacerte el gracioso con tal de que te recuerden,
olvidar a toda la gente que te quiere.



Queda prohibido no hacer las cosas por ti mismo,

tener miedo a la vida y a sus compromisos,

no vivir cada día como si fuera un ultimo suspiro.


Queda prohibido echar a alguien de menos sin

alegrarte, olvidar sus ojos, su risa,

todo porque sus caminos han dejado de abrazarse,

olvidar su pasado y pagarlo con su presente.



Queda prohibido no intentar comprender a las personas,

pensar que sus vidas valen mas que la tuya,

no saber que cada uno tiene su camino y su dicha.



Queda prohibido no crear tu historia,

no tener un momento para la gente que te necesita,

no comprender que lo que la vida te da, también te lo quita.



Queda prohibido no buscar tu felicidad,

no vivir tu vida con una actitud positiva,

no pensar en que podemos ser mejores,

no sentir que sin ti este mundo no sería igual.





Gracias Patri, por colgar ayer de mi habitación estas palabras.

Gracias mi niña

Te quiero


Te quiero

Quiero las luciérnagas que llevas en el pecho,

las que alumbran mi camino,

el farolillo que sigo mientras ando descuidada del mundo.


Quiero tus labios de agua, tu alma de viento, tus manos de arena,

tu cuerpo de fuego, te quiero...



Quiero tus mentiras, tus verdades, tus equivocaciones, tus triunfos...
te quiero...


....y ando tras de ti como una niña detrás de mariposas,

mirando al cielo, corriendo, sin importar si en el camino hay piedras

con las que caerme.

Te quiero

jueves, 21 de enero de 2010

La tristeza y la Furia. JORGE BUCAY



LA TRISTEZA Y LA FURIA


En un reino encantado donde los hombres nunca pueden llegar, o quizás donde los hombres transitan
eternamente sin darse cuenta...

En un reino mágico, donde las cosas no tangibles, se vuelven concretas.
Había una vez... un estanque maravilloso.

Era una laguna de agua cristalina y pura donde nadaban peces de todos los colores existentes y donde todas
las tonalidades del verde se reflejaban permanentemente...

Hasta ese estanque mágico y transparente se acercaron a bañarse haciéndose mutua compañía, la tristeza y
la furia. Las dos se quitaron sus vestimentas y desnudas las dos entraron al estanque.La furia, apurada (como siempre esta la furia), urgida -sin saber por qué- se baño rápidamente y más rápidamente aún, salió del agua...

Pero la furia es ciega, o por lo menos no distingue claramente la realidad, así que, desnuda y apurada, se
puso, al salir, la primera ropa que encontró...

Y sucedió que esa ropa no era la suya, sino la de la tristeza...
Y así vestida de tristeza, la furia se fue.

Muy calma, y muy serena, dispuesta como siempre a quedarse en el lugar donde está, la tristeza terminó su
baño y sin ningún apuro (o mejor dicho, sin conciencia del paso del tiempo), con pereza y lentamente, salió del estanque.

En la orilla se encontró con que su ropa ya no estaba.

Como todos sabemos, si hay algo que a la tristeza no le gusta es quedar al desnudo, así que se puso la única
ropa que había junto al estanque, la ropa de la furia.

Cuentan que desde entonces, muchas veces uno se encuentra con la furia, ciega, cruel, terrible y enfadada,
pero si nos damos el tiempo de mirar bien, encontramos que esta furia que vemos es sólo un disfraz, y que
detrás del disfraz de la furia, en realidad... está escondida la tristeza.

Te espero







Te espero cuando las lágrimas me acometen

con la fuerza del mar en lo ojos,

como olas de tu recuerdo,

insensata búsqueda en el día,

en los rincones, en el aire, en el espacio,

mis manos se alzan al vacío

y entre átomos de ingenio te traigo.



Te aguardo cuando te despides

y siento la maraña de nervios en mi estómago,

y miro hacia atrás indagándote en la nada,

buscándote entre planetas de ausencia.



Te concibo cuando te grito en el silencio

cuando desangro mi alma en cada letra

para llegar a ti.



Te invento en mis noches,

dibujos de sol y arena

perfilando tu rostro,

esbozando tu boca,

soñando que mis labios te tatúan la piel,

anhelando el roce de tu lengua,

temblando los cuerpos,

los cuerpos azules de cielo,

en mi imaginación.



Te retrato cuando te veo,

cuando te marchas,

cuando me golpea tu cariño en el pecho,

así me hallo en esta espera,

una veces dulce, tierna, suave,

otras con dolor, con tristeza, con ansias.



Te espero

angustia




Hoy vuelven a mi los recuerdos que me angustian,
siento que mi vida se esfuma por cada poro,
me aferro a tu dogma como un bebe al pecho,
al pecho trémulo de la madre.
Quiero estar en tu vientre, tumbada,exhausta,
que mis manos aprisionen tus senos
sentir que nazco de nuevo en ti,
aunque ya no respires,
aunque ya no estés,
recoger tu cuerpo entre mis brazos,
aunque los días hallan roído tu piel,
aunque cuando te vea no te reconozca,
quiero atravesar la lápida que nos separa,
morderla con mis dientes
darle patadas hasta derrumbarla,
clamarle a Dios que te traiga,
rescatarte de tu fosa,
para amarte.....

Todo el dolor, todo el amor,
pero volver a darte un abrazo,
sentirte pequeña en mi.

Mi tiempo se para,
las estrellas ya no me alumbran,
se me apagan las luces alrededor,
a mi paso las flores mueren,
las hojas no caen de los árboles,
a mi paso sólo silencio,
quiero recuperarte en mi vida
no sólo en mi recuerdo,
hoy me envuelve la angustia.

miércoles, 20 de enero de 2010

Patricia







Para ti porque me recogiste cuando más lo necesitaba, porque supiste esperar a que amainase mi tormenta, para ti porque en tu silencio estabas a mi lado, esperando a que fuese capaz de contarte que me dolía Para ti por tu amor incondicional, por tus sonrisas, por tus palabras de aliento, para ti porque si tu me lo pides vuelco el cielo, para ti porque fuiste mi suspiro, mi sonrisa, mi lágrima, mi tiempo, para ti por ser como eres tan tu, tan ángel, tan humana, para ti porque te quiero con locura, para ti porque haces que siga creyendo en Dios, para ti mi niña.

Mientras duermes


A tientas me cuelo en ti,
Mientras duermes,
Atajo los kilómetros que nos separan
Para beber de tu estrella,
Esa estrella que se inclina sobre mí
Y que renace cada instante
Transparente, silenciosa, cálida…

Despacio te abrazo en tu sueño
Para que no despiertes en mitad de la oscuridad,
Te envuelvo con mis brazos
Como si fuesen las sábanas
Para cuando abras tus ojos de luna
Pueda cubrirte de besos y ternura.

Duerme tranquilo que veló por ti.

OLA DE AMOR



Porque de todo se aprende del dolor y de la alegria.
Porque ser especiales sólo depende de uno mismo
y vosotros sois especiales para mí,
gracias por existir y sacar lo mejor de mi,
porque de nuestro duelo creceremos y aprenderemos
tantas cosas que seremos mejores personas
que os quiero, si este video os hace llorar que sea
de emocion, y que llegue esta ola de amor que os mando

martes, 19 de enero de 2010

El miedo a los otros


Una gota cae por el cristal arrastrándose por el,
en su camino me mira, enfrentamos nuestros ojos,
aterida la gota comienza a caminar más rápido,
como si fuese el miedo que tenemos a mirarnos unos a otros,
cae tan veloz que es inevitable que rompa su barriga en el suelo,
muriendo,pobre gota, cuando la veo ya esta yerta
como todas esas conversaciones o miradas que esquivamos en el día,
como todos los sucesos que evitamos mirar porque no nos gustan
o nos intimidan.

No seas como ese ápice de agua que corre por los cristales,
no rehuyas las miradas que te buscan,
haz el sendero despacio para poder empaparte de vida,
para poder regalar ternura

Tu boca


Tu sonrisa hace que floten mariposas
de mi estómago, tus labios mágicos
toman esa postura de luna que me vuelve loca,
veo asomar tus dientes cada uno de ellos
como estrellas en tu rostro,
y te miro y veo las estrellas que Madrid
no me ofrece en sus noches,
te observo y en tu cara veo universos
de felicidad.

Que bien me sienta tu risa,
tus historias contagiosas de ilusión,
cada día me haces más yo,
y a tu lado te hago más tu,
crecemos juntos en este viaje que es la vida.

Mirándonos en silencio,
sin decirnos nada porque no hay nada que decir,
solo los gestos, los ojos, la respiración
sonando profunda, estamos aqui, ahora,
somos al fin y al cabo sonrisas
en las pupilas de otros.

Mi madre


La niebla recoge la ciudad como una enredadera,
se fusiona con cada edificio, con cada persona,
con la materia porque materia somos todos,
materia viva o materia muerta sobrevolando los días.
Existen personas que andan muertos por las calles
y personas que reparten vida por los caminos,
ojos que te miran y te sacian el alma,
te recuerdan que hay Dios, que existe esperanza,
en mi desolación voy encontrando respuestas
a preguntas gracias a las personas que reparten vida.
He querido marcharme a tu lado, con ese afán nuestro
de pensar que no sabemos vivir sin las personas que tenemos y
se van, tengo que decirte adiós con el dolor más profundo,
se de sobra que ese dolor no habrá nadie que lo lapide,
se de sobra que ese dolor me acompañara el resto de mis días,
como si formase parte de mi, como si fuese un brazo, un ojo...
Porque así me duele tu pérdida como si fuese algo de mi cuerpo
que ya no esta, y es que te ame, te ame hasta el infinito,
no sólo eras una abuela, eras mi madre, y así me siento hoy
como si hubiese perdido una mama, porque me diste todo,
me diste la fe, la esperanza, la ilusión, me diste el miedo
de perderte.

Y en tu agonía tu fe la más fuerte, sabias que te ibas amor,
y te persignabas una y otra vez, con tu amor hacia Dios,
ese amor todopoderoso que se movía en ti, ese amor que te hacia
vivir cada día sin pedir más, sobreviviendo en tu poquito de cada minuto,
cuidando de todos porque así te lo mandaba Dios y tu en tu creencia
fuiste fiel hasta el último minuto.

No quiero creerlo pero las horas me ponen en los labios este sabor
agrio de despedida, y te escribo, te escribo porque escribirte
hace que fluya todo lo que siento, hay personas que andan muertas por las calles.

lunes, 18 de enero de 2010

Para ti.


Desnuda no soy nadie,
me visto con mi ropa de alegría,
desnuda no soy nadie
con mi alma en cueros corriendo calle abajo,
desnuda no soy nadie
cuando delante de ti se me cristalizan los ojos,
desnuda no soy nadie,
cuando abro mi corazón y te digo que te quiero,
desnuda no soy nadie
porque siento el frío del invierno,
desnuda no soy nadie
porque me siento indefensa como recien nacida,
desnuda no soy nadie
porque necesito tu abrazo
desnuda no soy nadie
porque te reclamo besos,
desnuda no soy nadie,
aunque me alumbren las estrellas,
desnuda no soy nadie
y desnuda estoy ante ti
porque quiero no ser nadie
y que me ames por ser asi
por enseñarte mi desnudo más cruel
mi desnudo más necesitado
mi desnudo el que más te ama.

Recuerdos que queman, recuerdos en bolas de lágrimas que me aturullan el alma,
no, aqui no llores, me trago la bola, siento como baja por mi garganta, pongo una sonrisa,
una sonrisa rota, como una muñeca sin brazos, me castañean los dientes, dificil trago este,
como si fuese alcohol de 90º, mi respiración es mas fuerte ahora, aguanto, aguanto,
pienso en la nieve, me tiembla el pulso, siento que me miran, se dan cuenta que me caigo,
me caigo.........y en mi caida me llevo a todos.

El estruendo de mi llanto, como un rayo en el cielo, me agarro del pelo, tiemblo, tiemblo,
no puedo me digo, salir de mi, salir de mi cabeza, mis recuerdos sonrien al verme caer,
no se enfrentarme a ellos, escucho sus carcajadas, estamos desvalidas me digo,
mi sombra, la luna y yo, no podemos...y caigo

Cuando todo se calma, es por que ya han pasado en procesión por mi cabeza haciendome polvo,
siento el alma fuera de mi, mirandome a los ojos, con terrible rostro, como de muerte y destruccion,
no me atrevo a mirarla, no me atrevo....marchate le digo.

Quejidos de mis huesos, mi sangre por fuera, mi cuerpo vacio, derrotada, no puedo,
escucho lejos de mi, palabras de consuelo, necesitas ayuda, debes ponerte medicacion,
pienso para mi, no sabia que habia medicacion para el alma, para los recuerdos, no sabia, que estaba
mal caer, mas preguntas, sin respuestas.

Ponte una sonrisa colgada y perpetua en tu rostro, aunque estes bajo la arena dentro del ataúd,
ponte una sonrisa para que los demas no sufran al verte,
yo no quiero esa sonrisa de muñeca rota, yo quiero mirarle a los ojos a mi alma y decirla
ven, ven conmigo, que tenemos que abrazarnos, y caminar de la mano.

Existen dolores que nos meten de cabeza en el fondo del mar junto a barcos naufragados,
alli, donde no necesitas el aire, alli donde solo hay silencio, alli esta nuestro corazon aterido,
y a veces necesitas bajar al fondo del mar para rescatarlo y volver como un pirata
sonriendo bañado en ron y sin un ojo.

Ya no estas en el cimbel de mi puerta, dejo todas elllas abiertas con la ilusión de que vuelvas


Busco el hilo de tu voz frágil mientras ando, el chasquido de las hojas, los pasos de los que tienen prisa, los niños de las manos de sus madres, algún pájaro atrevido que canturrea muerto de frío, pero tu voz, tu hilito de voz proviene de muy dentro de mi, tu voz emulsionada en mi alma, que hace retorcer mis venas y estremecer mi corazón, voy andando y te pienso, te hablo, te cuento que tal me fue el día, lo mucho que te ,echo de menos, las ganas que tengo de verte.

A veces la imaginación me sobresalta ¡eres tu!...y cuando miro bien, ni siquiera te pareces. Sigo andando, sin rumbo, dialogando contigo,mientras el invierno nos hace alfombras de colores, nos pone vaho en los suspiros, nos encoge aun más el cuerpo, y yo dibujo con mis dedos tu rostro en los cristale, con la estupida intención de tenerte, no puedo dejar de pensarte.

Quisiera acariciar cada hueso de tu cuerpo, posar mis labios en tu frente como una paloma, y volver a tenerte en el cimbel de mi puerta

domingo, 17 de enero de 2010

tu ausencia


Mi mirada al cielo, esclavizantes frases me recorren, los dedos entrecruzados al lado de tu pecho, al lado de Cristo...plegarias, plegarias continuas, tal vez a las estrellas, llanto doloroso, tangible que me enmudece el alma ¿dónde te encuentras mi amor? se divago el silencio en tu pecho, ¿dónde te encuentras? en que momento entraste quedamente en mi recuerdo para que cascadas de miedo me invadan, para que por mi sangre corra tu aroma, que flota en el aire cada instante, y tu sonrisa sea un eterno llover, tus manos barreños de esperanza.

Han debido de crecerte alas, asi estas en el cofre de mi recuerdo, blanca,
trémula, al lado de los tuyos, allí arriba, celosa estoy de Dios, celosa porque te posee.

Quiero volver a verte para sentir tu abrazo inmenso, para besarte, la mente juega un doble juego, me dice que estas y yo creo que en algún momento volveré a encontrarme contigo. Aqui estoy mi amor, conversando con tu ausencia, que sólo se queda el mundo sin ti, cuando la angustia se escapa por la puerta, entra la pena por la ventana, no existe anestesia que calme mi dolor, nuestros ojos incredulos de tanto desconsuelo incomprendido y la perpetua condena de tener que seguir.

Cada vez que te pienso, el primer día que te vi malita, se me abren las carnes de verte tan indefensa, sin quejarte, tenias que marcharte mi amor, y no te dejabamos ir, era más fuerte el corazón que la razón.

Muchos de mis sueños cogieron color alrededor de ti, muchas de las mejores cosas de mi vida, llegarón a través de tu sonrisa en tu rutina de traer lo mejor de todo, ahora en plena consciencia de la perdida, la busqueda esteril de la culpa, te escribo
como si cada palabra la fueses a escuchar, te quiero.

LA HIJA DEL MAR

Cristo de Medinaceli


Vestido de granate y dorado, tus manos morenas cruzadas pero abiertas,
con tus ojos de pena y tu rostro bañado en misericordia, te miro y en tus ojos
veo plegarias de personas agotadas, te miro y me infundes una pena calmada,
tu corona de espinas hoy en mi alma abrazándola, hoy me haces sangrar Dios mío,
hoy me llenas de profunda lastima el corazón, tu cabello negro, ondulado al igual
que las sombras que me acechan.

Cristo, mi Cristo llorando de tristeza, hoy me visto de nazarena ante ti,
te suplicó, te rezo, me rompo...acógela en tus manos, deja que ella bese tus pies
como tanto había deseado en su vida, déjale que te mire con sus pupilas inocentes,
tómala para ti, porque eso es lo que has decidido, Señor mío.

Dile que el tiempo no me cicatriza su ausencia,
dile que su amor ha sido lo más real de esta vida,
dile que le amo, que le amo tanto que esta soledad me marchita como una flor muerta,
dile que perdone mi rabia, mis sentimientos llorosos por la ausencia,
Señor me arrebatas un trozo de corazón y yo te lo entrego aunque me duela,
aunque me duelan las estrellas, la luna, la noche, este invierno áspero
que me envuelve, la lluvia que cae incesante como si fuesen trocitos de fe esparcidos por la ciudad.
Dios mío ayudame.

no se no pensarte


La razón de buscarte en cada rincón,
donde una sonrisa tuya bastaba para sanarme,
donde mirarte ya llenaba mi cielo,
es porque te necesito,
aun me quedan las señales gastadas de los besos,
aun mis manos huelen a ti,
tienen tus células de piel entre mis dedos,
aun tengo tu sudor en mis puños,
aun te imploro cada día.

Te fuiste y dejaste mi árbol de ilusión vacio,
me queda tan sólo el eco de tus recuerdos,
se me agolpan las palabras en la boca
de tantas cosas como te quiero decir

sábado, 16 de enero de 2010

desde dentro







Puedo decirte tantas cosas hoy..... te aseguro que puedo,

puedo decirte que te quiero,

que te ama hasta el elemento más ínfimo de mi ser,

que me quedo muy quieta cuando el llanto me encoge,

en este rincón escondido de la vida,

que todo me parecen cavernas de tu recuerdo, mi recuerdo.


De tus pupilas vi nacer el cielo, vi nacer el mar,

la claridad de la fragilidad de la vida,

vi nacer mi sonrisa y ahora mi llanto porque no estas.


Misteriosa la vida que te arranco la voz,

misterioso el miedo que tenia en mi cuerpo,

enredadera de miedo y congoja alrededor de mi alma,

apretándome las costillas,

tus manos eran un cuenco de estrellas,

te tocaba y sentía su luz,

la única luz que en ese momento existía.


Aquella noche de pavor,

apelmazada de esperanza sin fondo, te marchabas mi amor,

te marchabas sin retorno,

tu frente empapada de sereno amor como si fuese rocío,

tu cuerpo trémulo, tembloroso, no quería más que darte calor.